La guardería de Campoverde se convierte en la nueva sede del colegio Maruja de Quinta
En el año 2010 comenzó a hablarse de la construcción de una guardería municipal entre Campoverde y Los Militares, cuyo uso autorizó la Junta de Andalucía un lustro más tarde tras la edificación del inmueble. Después de casi un millón de euros de inversión y de que el gobierno andaluz anunciara que no iba a concertar ninguna plaza, no se volvió a tener noticias de este proyecto hasta el pasado mes de marzo, cuando el alcalde de Utrera, José María Villalobos (PSOE), anunciaba que la escuela infantil iba a seguir cerrada «hasta que haya demanda».
Sin embargo, dichas instalaciones abrirán sus puer tas, aunque no como guardería. Este edificio será la nueva sede del colegio de Educación Especial «Maruja de Quinta», que actualmente se encuentra en la Plaza de Gibaxa. La asociación Apudes, a la que pertenece dicho centro, ha alcanzado un convenio con el Ayuntamiento para que pueda hacer uso de dicho recinto, lo que permitirá un importante impulso al trabajo de la citada entidad a favor de la educación de personas con discapacidad intelectual.
En el acto de cesión de ese inmueble, el regidor utrerano explicó que «actualmente el edificio del colegio que se encuentra frente al ayuntamiento presentaba serias deficiencias que comprometían el normal funcionamiento del mismo». Así, los niños van a estar ahora «en un edificio nuevo y construido expresamente para usos educativos». Villalobos aprovechó la ocasión para poner en valor «el trabajo arduo y desinteresado de la asociación Apudes y el colegio ‘Maruja de Quinta’, por su dedicación a los niños y niñas de Utrera pero también de la comarca durante casi cuatro décadas». El alcalde destacó la «pionera» iniciativa que hace 36 años impulsó «un grupo de padres que decidieron dar un paso adelante por el bien de sus hijos, teniendo en cuenta que entonces la forma de pensar no era la misma que ahora, por lo que aquella iniciativa cobra si cabe más valor».
Por su parte, la presidenta de Apudes, María A. Garoffolo, afirmó que estaba viviendo un día «muy especial, en el que se cumple lo que es casi un sueño». Por su parte, la vicepresidenta también agradeció al Ayuntamiento «esta apuesta que redunda en el bienestar de nuestros alumnos y alumnas que, a partir de ahora, contarán con un colegio totalmente accesible y con mucha luz natural». Además, explicó que «a partir de ahora tenemos capacidad para admitir a más alumnos, ya que hasta ahora estábamos muy limitados por motivos de espacio».